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Paro zonal sorpresivo de banca privada

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Paro zonal sorpresivo de banca privada

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Este lunes 29 de agosto comenzó un paro sorpresivo en todas las sucursales y casas centrales de la banca privada, desde Ciudad Vieja hasta la calle Julio Herrera y Obes inclusive.

A partir de las 16 horas se interrumpió la atención al público, las cajas fueron cerradas con resguardo de seguridad y se produjo el retiro de los trabajadores.

Acto seguido, por resolución del Consejo del Sector Financiero Privado, los afiliados se trasladaron a la puerta de Banque Heritage, en Rincón 530 esquina Ituzaingó, para concentrarse en repudio al ingreso a ese banco de personal no afiliado de Citibank. 

A pesar de haber afirmado enfáticamente a AEBU que no contrataría a ningún trabajador despedido del Citi, Banque Heritage acaba de incorporar a una no afiliada al sindicato, quien se encontraba en esa situación.

El consejo del sector comunicó que la hora de reintegro a la actividad en las dependencias afectadas se informará en la concentración.

Tres puestos en el sistema

Una vez congregados los trabajadores del sector privado ante las puertas del Heritage — encabezados por sus autoridades y acompañados por integrantes de los consejos Central y Oficial—, tomó la palabra Juan Fernández, presidente del Consejo del Sector Financiero Privado. Como introducción agradeció la presencia de Marcelo Ronchi, presidente del Consejo de Sector Financiero Oficial y de otros integrantes de ese cuerpo y los felicitó por la obtención de un nuevo convenio tras 16 meses de lucha.

Acto seguido indicó que acababa de finalizar el período de 15 días acordado en el Ministerio de Trabajo para tramitar en forma tripartita una solución con Citibank por los tres puestos de trabajo en juego. Esta tripartita «se dio solo porque ocupamos Citibank», dijo.

A partir de esta afirmación Juan Fernández se permitió una reflexión: «Parafraseando al querido Alfredo, 'En mi país, qué tristeza que para  gestar un ámbito de diálogo y negociación sea necesario ocupar un banco, para sentarnos a dialogar y a negociar. Realmente nos estamos degradando como sociedad.  Se degrada la democracia de nuestro país cuando las patronales exigen movilizaciones y esfuerzos en ese sentido para entender el reclamo de los trabajadores».

Tras el nuevo fracaso de la negociación se preguntó: «¿Una nueva mosqueta? ¿Nos tomaron el pelo?  Cualquier especulación es válida», se contestó, «porque lo que hay del otro lado es silencio. Silencio e intransigencia. Silencio y autoritarismo por parte de una patronal que despide trabajadores cuando tiene puestos de trabajo para ellos».

Más adelante trajo un recuerdo del pasado vinculado con Banque Heritage, [porque] «hace 21 años este banco que hoy baja la cortina echaba a ocho de nuestros compañeros. Echaba a esos trabajadores, y ellos obtenían un puesto de trabajo en el sistema financiero por la lucha de sus compañeros. Claro que esos puestos de trabajo no volvieron al Heritage, se consiguieron en las otras empresas integrantes de la Asociación de Bancos Privados del Uruguay». 

Vuelto al presente denunció que hacía una semana que ese banco había tomado a un trabajador no afiliado despedido del Citibank y manifestó su indignación porque «pocas horas antes habíamos estado reunidos con los jerarcas de esta institución solicitando un puesto de trabajo para alguno de nuestros tres compañeros, y este fue negado alegando que no tenían puestos para otorgar». 

La lucha no está terminada y eso lo dejó claro Fernández, sino que cambia de objetivos: «Por esa razón estamos en las puertas del Heritage y por eso estaremos convocándolos acá recurrentemente, porque es necesario. Es necesario redoblar el esfuerzo para revertir el  destino de estos tres compañeros. […] Ya no por nuestro colectivo, esto es por toda la clase. El reflejo de una derrota  de nuestra causa es mal ejemplo para los otros bancos que están balconeando esta situación. Están balconeando y están negando [la existencia de] posibilidades reales: el Itaú está contratando, Santander está contratando, Scotibank está contratando, y acaba de entrar [a Heritage] una extrabajadora del Citibank no afiliada la semana pasada».  

La lucha contra estos tres despidos no se libra entre cuatro paredes, «el movimiento sindical, la clase popular, está muy atenta al conflicto que estamos desarrollando». Por ello, «es prioritario que redoblemos el esfuerzo de movilización en procura de un puesto de trabajo para Fernanda, Humberto y Iara. A eso estamos convocando esta tarde compañeros. A luchar hasta revertir. [Hacerlo] es posible porque estamos juntos, porque somos AEBU, porque nunca dejamos un compañero tirado en la calle. La historia nos obliga, las circunstancias lo ameritan, ¡Arriba los trabajadores! ¡Arriba AEBU! ¡Viva el PIT-CNT!».