Este 26 de diciembre se cumplen 40 años de la llegada de los niños del exilio, un viaje con 154 menores de edad proveniente de Europa que marcó un hito para la sociedad uruguaya y su proceso de restauración democrática.

"En el Uruguay se vivía en el año 1983 una gran efervescencia de movilizaciones, con una dictadura muy golpeada, casi derrotada, pero que seguía dando sus zarpazos", recordó Mariela Fernández, militante de AEBU y del Frente Amplio en aquel momento.

Fernández fue parte de la Comisión por el Reencuentro de los Uruguayos (CRU), un espacio plural de participación que fue el que organizó el viaje. "Algo a destacar y a recordar siempre es la unión que hubo. Nadie quería sacar rédito político ni de nada, era todos juntos", valoró Silvia Ferreira, hija de Wilson e integrante de la CRU.

"AEBU jugó un papel fundamental", subrayó Fernández, ya que en el sindicato se realizaron los primeros encuentros con Víctor Vaillant, otro de los pilares de la idea. Luego las reuniones de la CRU pasaron a realizarse en la sede de Fuecys, con el apoyo de todo el movimiento sindical.

"Cuando esto salió en la prensa, fue un aluvión de gente. Todo el mundo quería participar y se organizó con mucho cuidado", agregó Fernández, mientras que Silvia Ferreira apuntó que "la gente se volcó y quedó demostrado en la calle".

"Creo que la realidad superó todo lo planificado", opinó Ferreira, ya que la caravana del aeropuerto hasta la sede de AEBU, donde fueron recibidos los niños, terminó durando 5 horas y cambió el recorrido previsto en el medio del trayecto. "Cuando llegaron a Barradas, rompieron el cerco policial y bajaron hacia la Rambla", explicó Mariela Fernández.

"Es maravilloso lo que quedó en los niños, en sus abuelos y tíos. Es un episodio inolvidable", dijo Ferreira. "Fue un hecho único en el mundo. Fue una cosa imponente", concluyó Fernández.

Estas declaraciones fueron hechas para la realización de un corto documental que se publicará el 26 de diciembre en las redes de AEBU, con más entrevistas e imágenes de aquella jornada histórica.

También está en exposición desde esta semana una muestra fotográfica sobre la llegada de los niños en el foyer de la Sala Camacuá.